Nuestras creencias y pensamientos afectan todo en nuestra vida, incluso la salud mental. El Djinn es como un genio de la mitología preislámica; en árabe le dicen «jinn«.

Hoy vamos a hablar sobre los Djinn, de una forma muy interesante: involucra a la cultura musulmana y su relación con las adicciones y la salud mental.

¿QUE SON LOS DJINN?

Desde la visión marroquí, y en todas partes, la enfermedad se ve muy afectada por la cultura. Las emociones intensas como la rabia, la alegría, la tristeza o el miedo, así como los sustos, el estrés, recibir malas noticias o incluso el contacto con líquidos como la sangre o el agua sucia, pueden causar malestar emocional y enfermedades mentales.

Los Djinns (también jinn, yinn o jinx) son seres sobrenaturales con una interesante conexión con la creación de Alá. Se les representa, en compañía de los Malaika (Ángeles) y los Shayatin (Diablos), como entidades con forma corporal y mortal, aunque rara vez se dejan ver por los humanos.

En el hombre o la mujer, la energía positiva entra a través de «las puertas del cuerpo» simbólicas que todos poseemos. En el caso de las adicciones, algunas de las puertas comunes son las manos y la boca. Estas energías ingresan al cuerpo en momentos de fortaleza y equilibrio personal. Es frecuente que la conexión con energías positivas esté acompañada de una sensación de bienestar y lucidez.

¿Existe una cura para esto?

Cada una de las posibles atribuciones culturales que la sociedad musulmana otorga a una enfermedad supuestamente tiene una causa específica y va acompañada de una cura concreta. Sin embargo, existe la teoría de que la persona se forma por el cuerpo, la voluntad, el alma y la mente. El trabajo de curación supuestamente va enfocado a conseguir sanar esas áreas que componen a la persona. Es muy importante cuáles cree la persona que han sido las causas o causa que ha provocado la posesión por el Djinn.

La forma de curar una posesión suele implicar hacer una peregrinación en familia, repetir algunas palabras del Corán, usar remedios medicinales y hacer cambios en el estilo de vida, incluyendo tratar de encontrar paz interior para que el Djinn pueda irse del cuerpo.

Cuando una de esas jarras se hace añicos, el espíritu adentro sale como un torbellino, tomando la forma de un poderoso espíritu elemental gigantesco. Este espíritu solo obedece una orden antes de desaparecer en el aire, libre para hacer lo que quiera o buscar venganza. Mientras esté bajo el control del Mago, peleará con todas sus fuerzas contra los enemigos del dueño. Si un Djinn es asesinado, no muere del todo, solo desaparece para volver a aparecer más tarde.

Esto nos muestra que comprender la interconexión entre religión, cultura y salud es un desafío, similar a lo experimentado en la religión católica o judía. Resulta vital abordar la transculturalidad en el ámbito de la terapia y la medicina. ¿Ya conocías a este espíritu? ¿Sabías que había uno sobre las adiciones? Interesante, ¿verdad? Espera la próxima nota Sobrenatural. ¡Hasta pronto!