Este delicioso postre originario de México es muy popular en los puestos callejeros o en los locales. Es una paleta de hielo que combina el mango, el chamoy y Tajín en una explosión de sabores ideal para disfrutar en un día caluroso. Esta receta es facil y rápida de hacer, si quieres saber cómo se prepara, ¡quédate y te enseño!

Ingredientes:

para la base:

3 mangos maduros

1/2 litro de agua

2 cucharadas de azúcar

Chamoy y tajín al gusto

Para decorar:

Trozos de mango

palitos de madera

vasos desechables pequeños

Modo de preparación:

Vamos a comenzar pelando los mangos y quitándoles toda la pulpa posible. Ahora en una licuadora echaremos el mango previamente picado junto con las cucharadas de azúcar y el 1/2 litro de agua, licuamos todo hasta que quede una mezcla homogénea.

Ahora en los vasitos haremos la decoración, pondremos un poco de chamoy en la base de este o en las paredes para después echar la mezcla que hicimos previamente.

Cómo decoración para la parte de arriba podemos poner un poco de Tajín y más chamoy si quieres, también ponemos los trozos de mango y las metemos al congelador por 3 horas o hasta el día siguiente si prefieres.

Para desmoldar, mojaremos un poco el vaso sin que el agua toque la paleta, para después hacer un poco de fuerza para poder sacarla y ¡Listo! tenemos una delicia de dulce mexicano que seguro te caerá muy bien para esta temporada de calor.

Consejos:

Puedes variar la receta usando otras frutas como fresas o piña, y combinar sabores según tu preferencia.
¡Anímate a experimentar con diferentes toppings para hacer tus mangadas aún más irresistibles!

También puedes empezar con tu propio negocio vendiendo está alternativa ya que es mucho más saludable que un helado hecho por alguna empresa, y principalmente sabes lo que estás consumiendo.

Esta receta de mangadas es una forma deliciosa y sencilla de disfrutar de un clásico mexicano.

Espero te haya gustado esta receta y si es así no olvides de pasar por nuestra página de Revista SOMOS CONALEP. Gracias por leer esta receta y, ¡buen provecho!